Originada en 1832 en un taller de relojería suizo en Saint-Imier de la mano de Auguste Agassiz, Longines obtuvo su nombre y su logotipo tal cual lo conocemos hoy en 1867 de la mano de Ernest Francillon, sobrino de Agassiz. Desde su creación, Longines había admirado el mundo existente en torno a los caballos. Pero fue a partir de 1878 que la relación entre la casa relojera Longines con los deportes ecuestres se hizo efectiva al crear una pieza de relojería con un caballo y un jockey grabados en la parte frontal. Desde entonces, estos lazos que involucran a la marca con los deportes con equinos se han fortalecido. El primer reconocimiento a esta pasión llegó en 1912, año en el que Longines fue seleccionada por primera vez como cronometradora oficial en un evento de salto en Portugal.
En la actualidad, la firma ha ampliado su participación al enduro y las carreras de caballos. Sin embargo, su amor recíproco continúa y la marca es hoy el Patrocinador Global de la Federación Ecuestre Internacional (FEI). Además, en 2018, la Serie de Copa de Naciones de Salto de la FEI se denominará Longines FEI Copa de Naciones de Salto. Por otro lado, la marca continuará siendo cronometradora oficial y reloj oficial de la FEI y cronometradora oficial de los Juegos Ecuestres Mundiales FEI.
Pensada para ser llevada sobre la muñeca de las damas que disfrutan de los caballos, su diseño es audaz y elegante.
Pero el amor de Longines por los deportes ecuestres es mucho más que los patrocinios en competencias y lo demuestra a través de una deliciosa colección llamada Equestrian. Pensada para ser llevada sobre la muñeca de las damas que disfrutan de los caballos, su diseño es audaz y elegante. La marca del reloj de arena alado elabora entonces diferentes propuestas que son una alegoría del universo ecuestre: mujeres, monturas, estribos, todo es una fuente inspiradora para los diseñadores de la casa relojera. Es así como los arcos presentes en los hipódromos, los estribos en los cuales se apoyan los pies, la nobleza del cuero de las sillas se pueden encontrar en cada una de las piezas y sus audaces líneas. De esta manera, las manecillas marcan el ritmo del tiempo que se confunde con el elegante andar de los caballos.
Los modelos con arco presentan cuatro tallas de caja disponibles: 23 mm, 26 mm, 30 mm y 34 mm. Para los relojes inspirados en el estribo los tamaños son tres: 23,50 mm, 26,50 mm y 30 mm.
Las cajas de acero albergan un movimiento de cuarzo y cada una de estas piezas existe también en una versión engastada con diamantes. Los índices de las esferas negras, lacadas, pulidas y nacaradas, se adornan con diamantes. Para la esfera plateada flinqué se destinaron los números romanos, mientras que la esfera plateada presenta números árabes azules. En el modelo que recuerda a un estribo con esfera de nácar, también existe en una versión adornada con una doble hilera de diamantes. El cristal de los modelos Equestrian es de zafiro resistente a los arañazos y con varias capas antirreflejos. La estanqueidad de los relojes es de 3 bar. Para acompañar estas bellas piezas de relojería se diseñaron elegantes pulseras de piel pespunteadas a juego con las prendas de vestir de las amazonas.
Para más información: www.longines.com